El vínculo profesional entre Juan Carlos Ferrero y Carlos Alcaraz, que finalizó recientemente tras varios años de trabajo conjunto, se caracterizó por la cercanía entre el extenista y el joven jugador murciano. Según publicó el medio TVE, Ferrero expresó con claridad que “cerrar la puerta no sería la forma de terminar” tras la ruptura contractual, sugiriendo con estas palabras que no descarta una futura colaboración. La noticia principal queda así centrada en las declaraciones de Ferrero, quien relató los matices de la separación en términos profesionales, insistiendo en que la relación personal y la admiración mutua se mantienen intactas.
En diálogo con TVE, Ferrero confesó sentirse “un poco apenado” por la decisión de no continuar como entrenador de Alcaraz. Explicó que las diferencias surgieron principalmente por aspectos contractuales que no lograron conciliar a satisfacción de ambas partes antes del inicio de una nueva temporada. El extenista puntualizó que “a final de cada año siempre se repasa el contrato por si hay ciertas novedades, sobre todo por parte de ellos”. En este sentido, admitió que “al final hubo ciertos puntos en los que no hemos podido ponernos de acuerdo”, aunque evitó ahondar en los detalles concretos del desacuerdo.
Tal como consignó TVE, Ferrero remarcó que “en aspectos deportivos siempre hay ciertos contratos y ellos piensan que lo mejor eran unos puntos y yo otros”, subrayando que existe un componente habitual de negociación en este tipo de relaciones deportivas profesionales. Además, consideró comprensible el sentimiento de tristeza tras la separación, no solo para él sino para el equipo entero: “Éramos un equipo muy unido y por ciertos puntos no se puede seguir y estamos todos un poco apenados”.
Ferrero dedicó palabras de reconocimiento a todo el proceso vivido junto a Alcaraz y su entorno inmediato, destacando que tras varios años de trabajo el afecto sigue vigente y la relación con todos los miembros del equipo sigue siendo positiva. “La amistad va a seguir siendo absolutamente la misma y desde aquí le deseo un 2026 con muchos éxitos y que siga creciendo como jugador que ha sido el objetivo siempre de todos”, expresó Ferrero, según informó TVE. Asimismo, evitó personalizar las divergencias: “La relación es buena con todos los que rodean al número uno del mundo y no quiero señalar a nadie”.
Refiriéndose a la etapa compartida, Ferrero valoró especialmente el potencial de Alcaraz y la manera en que lograron juntos cumplir los sueños del joven jugador, llevando el peso de las expectativas desde la perspectiva de un equipo unido. Sobre estos años, compartió: “La historia que hemos vivido es muy bonita, tanto el equipo como yo hemos sido capaces de sacar esos sueños que tenía él dentro y poder cumplirlos. Lo vamos a recordar todos con muy buenos ojos”. Ferrero aprovechó para dedicarle un mensaje directo: “El legado que se deja es muy bonito y, de corazón, Carlos, que te vaya muy bien, a ti y a todo el equipo, ya sabes que aquí siempre me vas a tener”.
En relación al futuro inmediato de Alcaraz, Ferrero recomendó enfocarse en la preparación física y mental de cara a la próxima temporada, y más concretamente para el primer torneo de Grand Slam de Melbourne, Australia. Según precisó TVE, el exentrenador sugirió al jugador que mantenga “las mismas ganas, entrega y lucha de siempre” para afrontar Australian Open, el único Grand Slam que aún no ha conquistado. También aconsejó vivir el evento “con normalidad y sin demasiada presión”, considerando que esa ha sido la actitud que trataron de mantener a lo largo de estas temporadas.
Ferrero concluyó su análisis recordando su disposición para eventuales reencuentros profesionales, e insistió en la importancia de seguir adelante pese a las dificultades surgidas en la negociación contractual. Destacó que, a pesar de la separación, el objetivo compartido de impulsar el desarrollo deportivo de Alcaraz continúas siendo el mismo para todos los miembros de su equipo inicial. De acuerdo con TVE, el exnúmero uno del mundo reiteró que el futuro de la relación profesional permanece abierto, condicionado por el contexto y las decisiones que puedan tomarse más adelante.






