El primer número seleccionado, el 12.297, correspondió a una afortunada que se encontraba cerca del escenario. Con sorpresa y emoción, la ganadora se dirigió hacia el escenario, donde la escribana oficial corroboró los datos.
Como parte del protocolo, le realizaron una pregunta de rigor, que respondió con facilidad, así Marisa Flores Lugo se convirtió en la flamante dueña de un Peugeot 208. En ese momento, el presidente municipal Francisco Azcué le hizo entrega simbólica de la llave, marcando el cierre perfecto de una noche inolvidable para ella y para todos los presentes.
“Desde el principio pense que me lo iba a ganar” dijo en el escenario.
Marisa contó que es docente y su padre jubilado fue trabajador del citrus.
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