La voluntad del gobierno socialista de incorporar el lenguaje inclusivo en la constitución española suscitó un vivo debate en el país, donde el director de la Real Academia Española (RAE) pidió el lunes no confundir "la gramática con el machismo".
"Las lenguas se rigen por un principio de economía; el uso sistemático de los dobletes, como miembro y miembra, acaba destruyendo esa esencia económica", declaró el director de la RAE, Darío Villanueva, en una entrevista al diario El País.
"Las falsas soluciones, como las que proponen poner en lugar del 'o' y el 'a', el 'e', me parecen absurdas, ridículas y totalmente inoperativas", abundó. "El problema está en confundir la gramática con el machismo", advirtió.
La semana pasada, la vicepresidenta del gobierno español, Carmen Calvo, encargó a la RAE un informe sobre la adecuación de la Constitución española a un lenguaje inclusivo. "Tenemos una Constitución en masculino […] de ministros y diputados, que se corresponde con tiempos de hace 40 años", señaló la número dos del gobierno del socialista Pedro Sánchez.
La RAE ya inició "el trámite", indicó Villanueva este lunes, destacando no obstante que "la doctrina sobre el tema es muy clara y no creo que la academia se vaya a apartar de ella".
"El cambio de la constitución es muy difícil; francamente, lo veo como una serpiente de verano [culebrón del verano]", agregó. La Academia debería hacer un pronunciamiento oficial en octubre, según El País.
El debate sobre el tema se exacerbó luego de que el escritor y miembro de la RAE, Arturo Pérez-Reverte, insinuara que abandonaría la institución si la Academia se plegaba a la propuesta del gobierno.
"Tiene usted mi palabra", respondió Pérez-Reverte en Twitter la semana pasada a una persona que señaló que el escritor sería el único contrario a esta reforma a la que cederían los otros miembros de la Academia.
"La reacción de Arturo Pérez-Reverte, que puso la venda antes de la herida, no ha ayudado al sosiego. No se conoce un caso de nadie que haya abandonado la institución y no está en cuestión el carácter vitalicio del cargo de académico", dijo Villanueva a El País.