“Le sacamos el caballo, avisamos a la Dirección de Inspección Veterinaria del municipio y dimos intervención a la policía, porque además de faltar a la ordenanza que prohíbe la circulación de carros en el centro hay una evidente situación de maltrato que está penada por ley”, indicó en el lugar el director de la Central de Tránsito Walter Báez.
“La ordenanza establece claramente que los carros no tienen que circular en el centro y hay cartelería que señala con precisión donde está prohibido que pasen, pero además hay todo un trabajo de transformación de la actividad que viene impulsando la gestión para abordar esta problemática integralmente; sin embargo, de tanto en tanto se producen estas situaciones y la directiva que tenemos del Intendente es rescatar al animal y actuar con severidad para evitar que se sigan repitiendo estas acciones”, detalló el inspector.
En el mismo sentido, el secretario de Gobierno Alfredo Francolini reconoció que “es muy difícil evitar que de vez en cuando algún carrero quiera entrar al centro. Cuando esto pasa o cuando alguno vecino nos avisa, inmediatamente se interviene; pero no podemos disponer de un agente de tránsito en cada esquina en todas las calles para evitar que algunos pocos carreros que no terminan de adaptarse a esta situación traten de eludir las prohibiciones”.
“Sin embargo esto no invalida todo el esfuerzo que se está haciendo para transformar esta realidad y que en los últimos meses está dando resultados que cualquier vecino puede observar”, remarcó el funcionario, “no hay carros en el centro y no hay tantos carros circulando en la ciudad. Cada vez son más los carreros que se adhieren al programa de motocarros y las medidas que se comenzaron a gestar a principios de la gestión estás posibilitando que se haga realidad la transformación que tantos vecinos, y principalmente los proteccionistas y defensores de los animales, reclamaban hace tantos años”, agregó.
“Nos duele que pasen estas cosas y que otra vez se produzcan situaciones de maltrato que estamos tratando de erradicar por todos los medios posibles”, apuntó el director de la Unidad de Desarrollo Ambiental Martín Armanazqui, “pero entendemos que son situaciones aisladas y que todo cambio, cuando es de raíz, lleva un tiempo de adaptación y a veces algunos se resisten. Pero lo importante es que hay una decisión política a la que todos adherimos de terminar definitivamente con la tracción a sangre y vamos a seguir avanzando por ese camino”, concluyó.