"Reiteramos la convicción de que la transición a la democracia debe ser conducida por los propios venezolanos pacíficamente y en el amparo de la Constitución y el derecho internacional, apoyada por medios políticos y diplomáticos y sin el uso de la fuerza", indicó el canciller colombiano, Carlos Holmes Trujillo, al leer la resolución adoptada por los miembros del Grupo de Lima.
El Grupo de Lima se reunió este lunes en Bogotá, con la esperada presencia del vicepresidente de Estados Unidos y de Guaidó, quien se proclamó mandatario interino de Venezuela, para estrechar el "cerco diplomático" a Nicolás Maduro después de que el intento de ingresar ayuda humanitaria a ese país acabara en violencia.
"Estamos con ustedes", dijo Pence en un pésimo español en su discurso ante el Grupo de Lima. El vicepresidente norteamericano aseguró que los venezolanos deben seguir peleando para acabar con la crisis y les pidió que "busquen la libertad, luchen por ustedes y vayan con Dios". En la previa se esperaba una definición más fuerte del número dos de Donald Trump.
En especial por las advertencias de la Casa Blanca horas antes de que terminara el encuentro en Bogotá. "Todas las opciones están sobre la mesa", había afirmado el secretario de Estado, Mike Pompeo, consultado sobre la posibilidad de una intervención militar. "Los días de Maduro están contados", había dicho el funcionario en una entrevista en la cadena Fox.
En la declaración se expresó "el derecho de todos los venezolanos a vivir en democracia y libertad y, por consiguiente, reiteran su respaldo a la celebración de elecciones libres y justas, abiertas a la participación de todas las fuerzas políticas, con acompañamiento y observación internacional, organizadas por una autoridad electoral neutral y legítimamente constituida".
A renglón seguido, enfatizó en que unas nuevas elecciones democráticas "exigen la salida inmediata de Nicolás Maduro y el cese de la usurpación, respetando la autoridad constitucional de la Asamblea Nacional y al presidente encargado, Juan Guaidó".
El organismo también le pidió a la Corte Penal Internacional (CPI) que "tome en consideración" la "grave situación de Venezuela y la denegación del acceso a la asistencia humanitaria, que constituye un crimen de lesa humanidad".
"Solicitar a la Corte Penal Internacional que tome en consideración la grave situación humanitaria en Venezuela, la violencia criminal del régimen de Nicolás Maduro en contra de la población civil, y la denegación del acceso a la asistencia internacional, que constituyen un crimen de lesa humanidad", apuntó el documento.
Esta solicitud se enmarca en "el curso de los procedimientos que adelanta en virtud de la solicitud presentada por Argentina, Canadá, Colombia, Chile, Paraguay y Perú el 27 de septiembre de 2018, y posteriormente refrendada por Costa Rica y Francia, y bienvenida por Alemania".
En el documento también se condenó las "acciones deliberadas del régimen ilegítimo de Nicolás Maduro que, sin considerar el sufrimiento de la población", prohibió el ingreso de ayuda humanitaria el pasado sábado para paliar la crisis que vive ese país.
En ese sentido, el Grupo de Lima denunció "ante la comunidad internacional al régimen ilegítimo de Maduro por estar sometiendo intenci