El actual presidente de Ecuador, Daniel Noboa, y su rival, Luisa González, se enfrentan en unas elecciones reñidas. Los candidatos cerraron sus campañas con un empate según los sondeos. Una encuesta de Comunicaliza revela a Noboa con un 41,5% de intención de voto, frente al 41,1% de González. Ambos finalizaron sus campañas en Guayaquil, reflejo de la estrecha diferencia de cara al balotaje presidencial. Guayaquil, cuna de Noboa y bastión de Correa, padrino político de González, es símbolo de un país dividido. Tras una primera vuelta reñida, donde Noboa superó a González por menos de un punto porcentual, los candidatos buscan captar votos de indecisos en una nación con sufragio obligatorio.
González apeló a las mujeres para convertirse en la primera presidenta electa del país, criticando la gestión de Noboa. Este, por su parte, se presenta como una figura de mano dura contra el crimen, juvenil y enérgico. Durante la campaña, marcada por debates acalorados y ataques, se registró un aumento de la violencia en el país. Noboa, uno de los presidentes más jóvenes del mundo, utilizó las redes sociales como plataforma principal de propaganda. Por otro lado, González destaca su origen humilde y critica el capital millonario de su contendiente. Tras el reñido primer turno, Noboa denunció irregularidades en el conteo de votos, a pesar del descarte de observadores internacionales.
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