En esta ocasión, el Che Milei no estará presente debido a que nunca en la historia se ha visto algo similar.
De Hayek pasaste a Ponzi, y luego fuiste por mal camino.
Desde tu cuenta oficial de X promocionaste una criptomoneda privada, cuyo origen es desconocido.
Aprovechaste tu posición presidencial para inflar su valor.
Muchos confiaron en ti, compraron a precios elevados y en cuestión de horas perdieron millones, mientras que unos pocos, probablemente todos libertarios, se enriquecieron con información privilegiada. ¡Milei, tú mismo actuaste como el engaño en una estafa digital!
Y para colmo, luego afirmas que no estabas al tanto. ¿No eras tú “el mejor presidente de la historia”? ¿No eras tú “el genio de la economía”? Del autoproclamado “líder global” al ESTAFADOR CRIPTO.
¡Observa dónde nos has llevado con tu locura! Convertiste a Argentina en un casino donde el crupier es el propio Presidente. Esa es tu libertad de mercado… la del casino. Se te cayó la máscara.
Y pensar que desde el sillón de Rivadavia descalificas a todos los que no siguen tus palabras como “inútiles”, “incompetentes” y “mandriles”, cuando en realidad, el verdadero incompetente para ocupar ese sillón eres tú.
