En Argentina, el Día Nacional del Mate se celebra cada 30 de noviembre en honor al nacimiento de Andrés Guacurari, conocido como “Andresito”, un destacado defensor de la cultura regional en el nordeste del país.
El mate, una infusión elaborada con hojas secas de yerba mate, es una costumbre profundamente arraigada en varios pueblos de América Latina, destacándose Argentina y Uruguay. Su consumo tiene efectos en el organismo debido a su contenido de cafeína y antioxidantes.
Aunque el mate aporta solo 75 calorías por cada 100 gramos diluidos en 1 litro de agua a 70 °C, es importante moderar su consumo para evitar efectos adversos como insomnio o irritación gástrica en ciertas personas.
La mateína, que es similar a la cafeína, actúa como un estimulante suave del sistema nervioso central, promoviendo la alerta y mejorando la concentración de manera prolongada, sin generar ansiedad. Sin embargo, su consumo excesivo puede causar insomnio, por lo que se recomienda disfrutarlo con moderación.
Además de su efecto estimulante, el mate contiene compuestos bioactivos como los polifenoles, con potentes propiedades antioxidantes que ayudan a reducir el estrés oxidativo y prevenir enfermedades crónicas, incluyendo afecciones cardiovasculares.
Estudios han demostrado que el consumo regular de mate puede influir positivamente en el metabolismo de los lípidos, reduciendo el riesgo de aterosclerosis y mejorando la salud cardiovascular en general. Asimismo, la yerba mate puede ayudar a controlar la grasa corporal y mejorar la sensibilidad a la insulina, siendo útil en la prevención y tratamiento de la diabetes tipo 2.
A pesar de sus beneficios, se debe tener cuidado con el consumo excesivo de mate, ya que podría aumentar el riesgo de algunos tipos de cáncer, especialmente de boca, garganta y pulmones. Es recomendable consumirlo con moderación y a una temperatura alrededor de los 65 °C para cuidar la salud y disfrutar de esta tradicional infusión y sus beneficios.
