El veterano de combate con cicatrices mentales y profundamente deprimido, un estereotipo común en los medios, plantea la preocupación sobre la vulnerabilidad a la depresión de los miembros del servicio militar.
Sin embargo, un estudio reciente publicado en la revista BMJ Military Health sugiere que el servicio militar podría tener un efecto protector contra la depresión. Según los hallazgos, el servicio en las fuerzas armadas realmente reduce el riesgo de depresión en lugar de incrementarlo.
Investigadores liderados por X.L. Shi del Hospital del Cuerpo Provincial de Shandong, China, encontraron que el servicio militar se asocia con un 23% menos de riesgo de depresión, incluso al considerar otros factores influyentes.
A pesar de la percepción común de que el servicio militar podría fomentar la depresión debido a la separación de los seres queridos y las experiencias traumáticas del combate, el estudio sugiere que el crecimiento personal y las habilidades de afrontamiento desarrolladas durante el servicio podrían actuar como factores protectores.
Para llevar a cabo la investigación, se evaluaron datos de la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición de EE.UU. de 2011 a 2023, que incluyeron a casi 26,000 participantes, identificando una menor prevalencia de depresión entre aquellos que habían servido en el ejército.
Aunque los investigadores reconocen que grupos específicos dentro de los miembros del servicio tienen un mayor riesgo de depresión, como las mujeres, los solteros o divorciados, se destaca que el servicio militar en general parece tener un efecto protector contra la depresión.
Este estudio desafía percepciones previas sobre el impacto del servicio militar en la salud mental, enfatizando la importancia de considerar todos los factores involucrados en la relación entre el servicio militar y la depresión.
