Marcos Díaz, exjugador de rugby de 42 años, fue detenido en la zona rural de Strobel por la Policía Federal después de cuatro años prófugo de la Justicia Federal de Rosario. Díaz era una pieza clave en el financiamiento de un jefe narco rosarino, facilitando dólares para ser cambiados por pesos provenientes de búnkers de droga. Bajo un seudónimo, se movía en Entre Ríos, manteniendo una aparente vida normal.
La investigación judicial reveló que Díaz adquiría dólare en Buenos Aires para abastecer a la banda criminal liderada por el narco peruano Julio Rodríguez Granthon, actualmente preso en el penal de Ezeiza. Rodríguez Granthon, piloto vinculado previamente con la banda Los Monos de los Cantero, estableció su propio negocio criminal. En esta red, también se encuentra involucrado Gustavo Shanahan, ex titular de Terminal Puerto Rosario, quien manejó cifras millonarias en inversiones y operaciones financieras en la ciudad.
La conexión entre Díaz y Shanahan se basaba en la provisión de dólares que luego eran utilizados en la cueva financiera establecida por la banda de Rodríguez Granthon en Rosario. Mientras Shanahan y otros implicados fueron detenidos previamente, Díaz logró evadir a las autoridades desde el año 2021. Sin embargo, la PROCUNAR de Rosario, bajo la dirección de Matías Scilabra, continuó su búsqueda hasta dar con él cruzando el río Paraná.
Finalmente, en una operación de la División Antidrogas de la Policía Federal Argentina, Díaz fue encontrado en un campo entre Strobel y Aldea Protestante bajo el alias “Rafa Lewis”. Tras su arresto, fue trasladado a Rosario para su detención en espera de la indagatoria programada para el lunes. Hasta el momento, no se han identificado conexiones entre Díaz y Leonardo Airaldi, el narcotraficante de Diamante detenido el año anterior por liderar actividades de distribución y venta de drogas en la región.