Después de varias semanas de incertidumbre y la falta de información oficial, finalmente han salido a la luz imágenes del gendarme Nahuel Agustín Gallo, quien se encuentra detenido en Venezuela desde el 8 de diciembre. Hasta el jueves 2 de enero, su paradero era desconocido.
Estas fotos y videos fueron difundidos en redes sociales por Juan Diego Quesada, corresponsal en la Región Andina para el diario El País de España. Una verificación realizada por PERFIL para detectar inteligencia artificial en las imágenes arrojó resultados negativos, aunque no concluyentes.
En las imágenes de la supuesta prueba de vida, se puede observar a Gallo con una remera y pantalón celestes, en un entorno que parece ser un patio recreativo frente a gradas. Sin embargo, no se ha especificado la fecha en que fueron tomadas estas imágenes. María Alexandra Gómez, pareja de Gallo que lo esperaba en Caracas, lo reconoció de inmediato: “Es él. Son unos criminales. Puede ser que esté en la cárcel de El Rodeo”, declaró a Infobae.
A pesar de la falta de detalles sobre el contexto de las imágenes, se puede apreciar que el gendarme se encuentra en buen estado físico en lo que podría interpretarse como un centro de detención. El Gobierno venezolano había calificado a Gallo como “partícipe de una presunta conspiración nacional”.
Resulta llamativo que las imágenes de Gallo hayan salido a la luz el mismo día en que Argentina presentó una denuncia ante la Corte Penal Internacional por su detención, denunciando la violación de los derechos humanos más básicos. Este comunicado oficial fue emitido por la Cancillería, mencionando las declaraciones de Tarek William Saab, fiscal general de Venezuela, quien defendió la decisión de retener a Gallo, asegurando que participaba en “acciones conspirativas contra la paz republicana”.
La administración de Milei ha calificado el secuestro como una “violación grave y flagrante de los derechos humanos”, afirmando que constituye un “patrón sistemático de crímenes de lesa humanidad que se están cometiendo en Venezuela, y que claramente están bajo la jurisdicción de la CPI”.
Ante esta situación, y tras la denuncia realizada por la Cancillería argentina, la diplomacia local emitió un comunicado a través de X (anteriormente Twitter), en el que se solicitaban medidas cautelares a la CIDH por Nahuel Gallo. En este comunicado se pide garantizar su protección, ordenar su liberación inmediata y asegurar su retorno seguro a Argentina. Se destaca la urgencia del caso y el riesgo inminente para la vida e integridad de Gallo, exigiendo su pronta resolución por parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos al Estado venezolano.
En medio de la tensión originada por el caso del gendarme detenido el 8 de diciembre, se confirmó que el presidente Javier Milei recibirá este sábado al dirigente opositor venezolano Edmundo González Urrutia en Casa Rosada.
El militar nacido en Catamarca fue capturado por fuerzas de inteligencia mientras cruzaba la frontera entre Cúcuta, Colombia, y Táchira, Venezuela, siendo acusado de realizar actividades de espionaje para el Gobierno argentino. Según sus allegados, Gallo había emprendido un viaje desde Mendoza con el objetivo de reunirse con su esposa, María Gómez, y su hijo de dos años, que residen en Venezuela desde hace varios meses, para luego regresar a Argentina y retomar sus responsabilidades.
María Gómez relató que Gallo fue retenido en el área de Migraciones de Venezuela, donde las autoridades revisaron su celular de forma arbitraria. Enfrentando esta situación, manifestó: “Soy venezolana y estoy sufriendo esta pesadilla que vivimos. Llegué a Venezuela hace siete meses por asuntos personales, para asistir a mi mamá”.
La hermana del gendarme indicó que desconocen el paradero y quién lo tiene bajo custodia. Durante una entrevista en radio Valle Viejo, mencionó que se pusieron en contacto con la Gendarmería Nacional Argentina (GNA), pero no obtuvieron información adicional sobre su localización.
