El día –desde el punto de vista climático– resultó perfecto. Sol, temperatura agradable y una cancha de fútbol –la de Defensores de Belgrano– preparada para recibir a las columnas de los gremios que integran la CGT para festejar el día del Trabajador. No llegaron todas las esperadas, pero igual el estadio lució razonablemente colmado. Allí, la central obrera llamó, a través de un documento, a recuperar "el rumbo hacia el desarrollo, la producción y el trabajo" para garantizarle a las mayorías populares la "justicia social y la inclusión" y –en el marco de este tiempo electoral– reivindicó el derecho que le cabe como columna vertebral del peronismo a "participar en las decisiones políticas".
Luego, los triunviros Héctor Daer (sanidad) y Carlos Acuña (estaciones de servicio) dieron sus discursos donde rechazaron cualquier intento de reforma laboral –que propone desde JxC–, repudiaron los discursos de la derecha que llaman a "dinamitar" todas las instituciones y plantearon la necesidad de discutir la reducción de la jornada laboral.
Se cuidaron de realizar alguna expresión a favor de los posibles candidatos del Frente de Todos. Tanto lo hicieron que no leyeren el mensaje de Sergio Massa. Lo que no lograron disimular fueron las ausencias del sector que responde al triunviro Pablo Moyano. La negativa a citar en el documento la proscripción a Cristina Kirchner y la reunión con Massa, donde no invitaron al moyanismo, provocó el faltazo de este importante sector del sindicalismo argentino.
Además de Pablo Moyano no participó Abel Furlán de la UOM. Tampoco fue Mario Manrique del Smata y los gremios que integran la Corriente Federal de los Trabajadores, entre otros. Todos sindicatos identificados con Cristina Kirchner. Sergio Palazzo, líder de la Bancaria, fue el único referente de este sector presente, pero con una particularidad, ingresó al escenario cuando terminaba el acto.
El malestar que provocó la ausencia comenzó a gestarse el miércoles de la semana pasada cuando se hizo pública la reunión de la mesa chica de la CGT, que integran Daer y Acuña con los gremios no moyanistas, con el ministro de Economía, Sergio Massa. Moyano avisó que esto de "cortarse solos" había molestado. El faltazo se definió durante la mañana cuando no hubo posibilidades de que el documento de la CGT –que el titular del gremio de Seguros, Jorge Sola, leyó con épica entonación– de incorporar un repudio a la persecución y proscripción de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
No alcanzó con que Acuña, al momento de su discurso, considerara que los sectores que vivaron el cáncer que sufrió Eva Perón, que apoyaron los golpes y que se opusieron a las vacunas contra el covid, son los mismos que intentaron matar a CFK. Según trascendió, la cita de Acuña se produjo por orden de Luis Barrionuevo, su jefe político y sindical.
Las ausencias tampoco se disimularon con, por ejemplo, la participación de Hugo Moyano en el escenario. La columna de camioneros que estuvo presente interrumpió varios minutos el discurso de Daer. Los de la Uocra, ubicados en otra tribuna, se sumaron vivando a su secretario general, Gerardo Martínez, que no estuvo por encontrarse enfermo. La "lucha" de cánticos logró que el discurso de Daer se detuviera varios minutos más.
No había mu






