El año 1970 fue crucial para los Rolling Stones. Decidieron independizarse de los sellos discográficos y crear su propia compañía, lo que los llevó a buscar una identidad visual única y auténtica. Así nació la famosa "Lengua Stone".
En busca de un logo que transmitiera energía y rebeldía, Mick Jagger contactó a John Pasche, un joven diseñador del Royal College of Art de Londres. Inspirado en la diosa hindú Kali, Pasche creó un emblema con labios rojos y una lengua prominente que reflejaba la actitud desafiante y sensual de la banda.
El logo debutó en 1971 con el lanzamiento de Sticky Fingers, convirtiéndose en un símbolo icónico que se replicó en camisetas, chaquetas y encendedores de los fanáticos. La estética ligada al rock de estadio y la globalización de la marca llevaron a los Rolling Stones a multiplicar sus ingresos por merchandising.
Aunque inicialmente recibió poco dinero por su creación, Pasche logró un contrato de regalías con la banda y vendió sus derechos en 1984. A pesar de ello, su nombre quedó ligado para siempre a la historia del rock.
Más de cinco décadas después, la "Lengua Stone" sigue presente en giras, discos y productos de la banda, manteniendo su vigencia como un icono universal que trasciende generaciones y refleja la fusión entre arte pop, rebeldía juvenil y estrategia comercial.






