La Mesa de Enlace de Entre Ríos se reunió el viernes con el ministro de Economía y Producción de la provincia, Hugo Ballay, oportunidad en la que las entidades plantearon con crudeza la grave situación que atraviesa el sector agropecuario por tercer año consecutivo en todas sus actividades, producto de la sequía y extremas temperaturas.
En la misma participaron representantes de los cuatro gremiales que integran dicha Mesa (FARER, SRA, FAA y FEDECO); el titular de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos; funcionarios provinciales y representantes de INTA; entre otros actores que conforman la Comisión Provincial de Emergencia Agropecuaria.
LA PALABRA DEL GOBIERNO RPOVINCIAL
Tras evaluar informes obtenidos fruto de relevamientos realizados en cada una de las zonas agroecológicas de la provincia, Ballay aportó: “El gobernador Gustavo Bordet nos pidió, que, como siempre, convoquemos al diálogo a las organizaciones para analizar la situación de emergencia. Todos los temas tratados enriquecen la relación con un sector importante para la provincia y el diagnóstico es coincidente”. De inmediato complementó con que “los informes aportan un panorama de la situación y desde el gobierno volveremos a analizar los lineamientos en un marco de diálogo permanente”.
Confió que el apoyo oficial se traduce en, por ejemplo, aportes no reintegrables, tasas subsidias y diferimientos o exenciones impositivas.
“Convocamos a todos los sectores para hacer las evaluaciones correspondientes entre todos estos actores que nos permitan tomar las mejores decisiones para paliar la situación con las herramientas disponibles en el Poder Ejecutivo provincial, además de reforzar y fortalecer las gestiones que se hacen ante el Gobierno nacional", definió Ballay.
Y determinó que “el miércoles volveremos a reunirnos para avanzar en una propuesta concreta a partir de los aportes de todos los sectores involucrados para que el gobernador Gustavo Bordet pueda redactar el mejor decreto posible”.
Por su parte, el secretario de Agricultura y Ganadería, Lucio Amavet, determinó que “la situación es delicada en un mosaico de actividades que van desde la agricultura y ganadería tradicionales; a las economías regionales, el tambo y la producción de pasturas. El diagnóstico es, con matices, compartido por el conjunto de representantes del agro”.
El escenario agropecuario se encuentra atravesado por precipitaciones por debajo de los promedios históricos, signada por un evento Niña que lleva tres años de permanencia en la región. La situación se complementa con heladas tardías en noviembre, que perjudicaron el cierre productivo de los cultivos de la campaña de granos finos y el arranque temprano de la siembra de maíz.
Hay que precisar que la ley 10836 fue sancionada en octubre de 2020 y define la conformación de la Comisión integrada por los ministerios de Economía, Producción, Planeamiento, un representante de la Cámara de Diputados y las cuatro entidades que representan al sector primario. Además, la ley faculta a convocar a otras instituciones para que participen del análisis, debate y evaluación de cuáles son las cadenas de valor afectadas por el evento climático.
En ese marco, se presentaron propuestas concr






