La llegada de Nicolás Varrone a la Fórmula 2 reavivó las expectativas sobre la posible entrada del piloto argentino a la Fórmula 1. Si bien el 6 de noviembre del año que viene cumplirá 26 años, el hecho de ser piloto oficial de General Motors (GM) le abre una perspectiva distinta a la del resto de las escuderías de la Máxima y la chance en el flamante equipo Cadillac puede concretarse a futuro.
El piloto bonaerense confirmó su incorporación al equipo Van Amersfoort Racing (VAR) y cumplió con el pedido de GM de meterse en la categoría previa a la Máxima para ver qué tal le iba. Nico corre para la marca estadounidense en las carreras de larga duración (Endurance): con un Corvette ganó las 24 Horas de Le Mans y fue campeón mundial en 2023.
Pero le faltaba su paso definitivo al ambiente de la F1 y esta es su gran carta para conseguirlo. Aunque cabe aclarar que no todos los campeones de la F2 lograron el ascenso esperado y el caso de Felipe Drugovich es el más claro: campeón en 2022 y piloto de reserva de Aston Martin, todavía no corrió ninguna carrera en la F1. Lo mismo pasó con Théo Pourchaire (2023), quien debió probar suerte en la IndyCar, al igual que Callum Ilott, subcampeón en 2020 detrás de Mick Schumacher.
No obstante, esta contratación con VAR es el principal motivo para que Varrone sueñe con una chance y que “Dios lo escuche”, como mencionó en sus redes sociales. Como viene ocurriendo en las últimas décadas, quienes están bajo la órbita de un equipo de F1 o en este caso GM, tienen posibilidades de ser evaluados para un posible ascenso. Por ejemplo, en el resto de los equipos de la Máxima están las academias que desarrollan jóvenes y algunos de ellos consiguen el tan ansiado ascenso, como el caso de Franco Colapinto en Williams en 2024.
En cuanto al presupuesto, hay tres empresas internacionales que se sumaron para cerrar el acuerdo. A nivel local también hay tres conocidas marcas que estarían a punto de sumarse.
Varrone buscará primero juntar la mayor cantidad de puntos para la Superlicencia, que es el requisito indispensable para correr en F1. Hoy Nico tiene 12 puntos y le faltan 28. También deberá tener al menos 300 kilómetros en un auto de F1. Va a ser una tarea difícil en una escudería como VAR que hoy está penúltima en el campeonato.
La temporada que viene, el de Ingeniero Maschwitz tendrá entre sus rivales a Colton Herta, el piloto de reserva de Cadillac en F1 en 2026. El estadounidense, que cumplirá 26 años el próximo 30 de marzo, correrá con el equipo Hitech, una de las más experimentadas en categorías formativas. Esto puede representar un duelo mano a mano que GM utilizará para medir las aptitudes de ambos pilotos ante un posible ascenso a su equipo de F1.
Infobae pudo saber que, a diferencia de la doctrina europea, GM y por ende Cadillac tienen una filosofía de trabajo que no descarta a un piloto por su edad. Se concentran en su formación, talento, rendimiento y profesionalismo. Por eso Varrone tiene motivos para ilusionarse. A su favor, va a tener enfrente a un Herta que corrió solo una temporada en Europa, cuando fue subcampeón de la Fórmula 3 Española en 2016. Luego siempre estuvo en el ambiente de la IndyCar.
De hecho, esa categoría fue una alternativa para Varrone en 2026 e incluso GM lo iba a bancar ya que les da los motores Chevrolet a algunos equipos, entre ellos el del argentino Ricardo Juncos. Hubo una chance de probar a principios de mes, pero tan encaminadas estaban las negociaciones por Fórmula 2 que la gente de Nico prefirió dejar de lado la oferta en la IndyCar.
Nico, además, tiene ese extra de tener un as bajo la manga para poder pelear a muerte por un puesto pese a no tener un buen auto, como lo hizo este año con el Porsche 963 del equipo Proton Competición de la clase Hypercar, la más importante del WEC. En un equipo privado, con poca guita y sin repuestos, y teniendo que usar en Fuji los mismos frenos de las 6 Horas de San Pablo, Varrone mandó una maniobra magistral ante uno de los Toyota, que están respaldados por un equipo oficial y apoyo de fábrica.
Detrás de los pilotos titulares de Cadillac, Sergio Checo Pérez y Valtteri Bottas, están el propio Herta como piloto de reserva y tres pilotos para el simulador de F1: Pietro Fittipaldi, Charlie Eastwood y Simon Pagenaud. Pero esto no significa que Varrone esté descartado para un posible ascenso en el futuro. Todo lo contrario. Si GM pidió como condición verlo en la F2 para analizarlo, los otros pilotos mencionados también deberían tenerlo en cuenta, porque Nico ya sabe cómo sacarle el jugo a un auto con poca competitividad.
Cadillac iniciará la temporada 2026 como el 11° equipo de la Fórmula 1 con Pérez y Bottas como pilotos titulares, para aportar experiencia a una escudería que deberá desarrollar el auto pero también todos los sistemas de trabajo. Detrás de ellos, Herta es el piloto de reserva principal ante un posible problema.
Hay que recordar que la Fórmula 1 tiene que dar por temporada cuatro tandas de prácticas a pilotos novatos a lo largo del calendario. Es decir, darle el auto titular a un piloto que no haya corrido más de dos carreras en la Máxima. Un ejemplo clarísimo de esta reglamentación se va a ver en la FP1 de este viernes en el Gran Premio de México, donde habrá nueve pilotos novatos sumando rodaje.
El argentino probó este año coches de 2018 de Fórmula 2 de los equipos Campos y VAR. Sus tiempos fueron impresionantes en esas pruebas privadas en España. En diciembre de 2024, luego de cinco años sin subirse a un auto de fórmula, fue segundo en la tanda de la tarde de los entrenamientos oficiales de postemporada llevados a cabo en Abu Dhabi. Generó un gran impacto en el ambiente. Si repite sus actuaciones heroicas y logra demostrar con los tiempos sus condiciones, puede tener su gran chance.
Se adapta rápido a los autos por su talento e un montón de veces que no pudo probar por falta de guita, Varrone siempre rindió bajo presión. No le quedó nada en los últimos cinco años, pero tiene un futuro enorme.
Desde aquella Ferrari “robada” en plena pandemia para una prueba, que fue fundamental en su carrera, hasta reinventarse en el mundo del Endurance para estar entre los pilotos mejor vistos a nivel internacional. La historia de Nicolás Varrone es para el cine, parece sacada de un guion que lo tiene todo: drama (casi cuelga los botines por falta de guita), alegría por sus victorias y la emoción por el sueño de la Fórmula 1, que puede tener final feliz.
