Una madre ha levantado su voz en busca de justicia, denunciando la discriminación y el rechazo que ha sufrido su hijo con discapacidad en el sistema educativo. Ruth Solis, madre de un niño con síndrome de down, detalla cómo ha sido rechazado en diversas escuelas públicas, enfrentándose a la negativa de otorgarle un banco cercano a su hogar.
La lucha de Ruth por encontrar un lugar adecuado para su hijo ha sido una odisea de puertas cerradas y desdén por parte de las autoridades educativas. A pesar de contar con el respaldo de la ley y el carné de discapacidad de su hijo, se ha enfrentado a la hostilidad y el bullying tanto de maestros como de supervisores.
La madre desesperada ha recurrido a los medios de comunicación en un último intento por llamar la atención de las autoridades responsables. Su historia revela una realidad preocupante en la que la inclusión y el respeto a la diversidad parecen ser meras palabras vacías en el entorno educativo.
Es fundamental que este caso no pase desapercibido y que se tomen medidas concretas para garantizar que todos los niños, independientemente de sus capacidades, tengan acceso a una educación digna y libre de discriminación. La voz de Ruth y Mateo debe ser escuchada para que su lucha se convierta en un grito de justicia y cambio en el sistema educativo.
Fuente: Diario El Sol
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