El canciller Gerardo Werthein expresó su apoyo a la postura de Javier Milei al no saludar al jefe de gobierno porteño, Jorge Macri, y a la vicepresidenta, Victoria Villarruel, durante el Tedeum celebrado en la Catedral Metropolitana. El gesto de Milei ocurrió minutos antes de que el arzobispo Jorge García Cuerva enfatizara la importancia del respeto y la convivencia, y criticara la presencia de odio y agresión en la sociedad.
"Después de haber sido parte de una campaña difamatoria que solo buscaba perjudicar a Javier y, por ende, a Argentina, no se puede esperar un gesto de cortesía como si nada hubiera pasado", expresó Werthein en sus redes sociales. El canciller hizo hincapié en que las acciones tienen consecuencias, respaldando la decisión de Milei de mantener una postura firme frente a quienes considera responsables de difamarlo.
La situación desató polémica en las redes sociales, generando debate sobre la conducta en eventos públicos y la necesidad de mantener la cortesía y el respeto en todo momento. A pesar de las críticas, Milei se mantuvo firme en su postura, siguiendo los principios que considera fundamentales para el ejercicio de la política en el país.