El Ministerio de Salud ha tomado la decisión de reducir el personal en la Dirección de Respuesta al VIH, Hepatitis y Tuberculosis en un 40%, así como en la Dirección de Vacunación (Dicei) en un 31%. Ante las críticas recibidas, aseguran que ambas dependencias continuarán operando como lo venían haciendo antes de la disminución de empleados.
En la Dirección de VIH, se prescindieron de 29 contratos de un total de 71 empleados, mientras que en la Dicei, no se renovaron 14 contratos de 44 personas que trabajaban en esa área y cuyos contratos finalizaban el 31 de enero. Estas cifras se suman a los 1.400 despidos previos en la gestión de Mario Lugones.
Recientemente, la Fundación Huésped emitió un comunicado en redes sociales expresando su preocupación por la medida, argumentando que impactará negativamente en la capacidad y alcance de ambas dependencias. Exigen transparencia sobre cómo se garantizará su funcionamiento, enfatizando que se trata de la salud de millones de personas, una tarea en la que la organización se dedica a prevenir y combatir la propagación de enfermedades de transmisión sexual.
El Ministerio de Salud salió al paso de las críticas, asegurando que las direcciones afectadas podrán seguir desempeñando sus funciones a pesar de las reducciones de personal. Voceros ministeriales han afirmado que las áreas mantendrán su operatividad, contando con autoridades designadas para llevar a cabo los programas correspondientes.
Se han designado nuevas autoridades para gestionar ambas direcciones, confirmando sus competencias y enfatizando que se trataba de áreas con exceso de personal. Argumentan que las desvinculaciones se debieron a tareas duplicadas con otras áreas, falta de funciones e inasistencias injustificadas. Incluso, mencionan que entre los trabajadores cesanteados se encontraba un locutor, según fuentes oficiales citadas por la agencia de noticias NA.
