En la cancha, donde se juegan los partidos, no hubo dudas. River le ganó con mucha autoridad a Racing y con un contundente 2 a 0 ganó la serie de octavos y avanzó a cuartos de final de la Copa Libertadores. Los goles los hicieron Lucas Pratto y Exequiel Palacios. El técnico Marcelo Gallardo, suspendido, lo vio desde un palco y celebró una victoria clave de su equipo.
De punta a punta, con su clásica personalidad en esta clase de partidos, River sacó chapa y alejó los fantasmas del bajo nivel de juego que mostró hasta ahora en la Superliga. Con el primer gol de Pratto el Millonario rompió una racha negativa de 402 minutos sin convertir; el Monumental explotó al igual que el delantero, que hacía rato era criticado por su falta de aporte en la red.
River borró a Racing de la cancha en los primeros 45 minutos. Fue tan superior que hizo parecer a la Academia como un equipo amateur, errático y flojo de papeles. A Eduardo Coudet se lo vio corriendo de acá para allá, a los gritos y dándoles indicaciones a sus futbolistas. Pero la reacción nunca llegó. Tras un error de Nery Cardozo en un tiro libre a favor, los de Gallardo respondieron con una contra letal que terminó en gol de Palacios.
El Millonario siempre tuvo el partido en la palma de su mano. Lo controló de principio a fin, prácticamente sin sufrir.
En el segundo tiempo la Academia intentó llegar a un descuento que nunca encontró. Coudet sacó a Cardozo (¿por su error en el segundo gol de River?) y metió a Pol Fernández, exmediocampista de Boca y Godoy Cruz que mostró algunas cosas interesantes en estos primeros encuentros de la Superliga. Pero estuvo solo, poco acompañado; intentó pero no pudo.
Una de las más claras para la Academia fue a los 62 minutos, tras un centro que Nery Domínguez transformó en un remate que por poco se fue por encima del travesaño. También apareció la mano salvadora de Franco Armani, que a los 75 le negó el grito de gol a Gustavo Bou, de flojo partido. River también tiene eso: un arquero que dice presente en las malas.
Rafael Santos Borré puso el 3 a 0 para River y al rato llegó el escándalo: Enzo Pérez fue reemplazado y al salir del campo de juego le hizo un gesto a Ricardo Centurión, quien reaccionó e intentó pegarle. El árbitro echó a ambos y ahora el mediocampista Millonario no podrá enfrentar a Independiente en cuartos de final.
