
El gasto en publicidad de YPF ha alcanzado niveles sin precedentes, con un aumento del 55% en el primer trimestre de este año, siendo el más alto desde su reestatización en 2012. Esta estrategia se vincula con la promesa inicial de Javier Milei de eliminar la pauta oficial al asumir su gobierno, pero en lugar de eso aprovechó a YPF, Banco Nación y Aerolíneas Argentinas para seguir pautando a medios y periodistas afines.
Es Santiago Caputo quien controla directamente la distribución de la pauta de estas empresas estatales. Además, el manejo de la publicidad por parte de YPF resulta descontrolado, con un gasto de $ 97.110 millones en 2024 comparado con los $ 31.749 millones asignados en 2023. Esta situación ha llevado a la empresa a tener una caja en números rojos.
Por otro lado, la opacidad en la distribución de recursos y la falta de transparencia en los números financieros de YPF han generado polémica, especialmente tras la exigencia de la justicia para que la empresa revele parte de esta información. En este escenario, el presidente de YPF se ha negado a revelar detalles específicos.
El incremento del gasto en publicidad ha sido cuestionado por su magnitud injustificable, lo que ha llevado a una disminución significativa en las ganancias de la petrolera. Esta situación contrasta con la política de ajuste del gasto en otros sectores, planteando interrogantes sobre la gestión financiera en la empresa estatal.