La Justicia Federal está investigando un posible caso de maltrato y abuso de autoridad en la base naval de Vicente López, donde una voluntaria de la Armada sufrió una grave lesión en la cabeza como consecuencia de la violencia durante un entrenamiento. La joven de 21 años estuvo en coma y como resultado de los hechos, se realizaron allanamientos y nueve miembros de la fuerza naval quedaron detenidos.
El incidente tuvo lugar el pasado 4 de abril, cuando Brisa Páez participaba en un simulacro de control de disturbios. Según relatos de algunas compañeras, durante el ejercicio uno de los instructores chocó violentamente con el escudo de la joven, causando que Páez cayera hacia atrás golpeando fuertemente su cabeza contra el suelo. Algunos testigos sugieren que este choque violento fue intencional.
A pesar de llevar puesto un casco de protección, la voluntaria mostró signos evidentes de desorientación. A pesar de reportar fuertes dolores de cabeza, no fue atendida inmediatamente. Horas más tarde, un médico de la base la examinó, le recetó calmantes y ordenó su traslado al hospital militar de Campo de Mayo. Tras mostrar pérdida de sensibilidad en un lado de su cuerpo, fue trasladada al Hospital Militar Central en Belgrano, donde se le indujo un coma farmacológico para detener las convulsiones.
La jueza federal a cargo de la investigación, Sandra Arroyo Salgado, ha ordenado allanamientos en la base naval de Vicente López y en los domicilios de los involucrados, quienes eran responsables de la instrucción en la que participaba Páez. A raíz de la investigación, nueve militares han sido detenidos y se enfrentan a acusaciones de lesiones graves, incumplimiento de deberes públicos y encubrimiento. Además, se ha iniciado una investigación interna en la Armada para determinar responsabilidades según el Código de Disciplina de la fuerza.